miércoles, 27 de agosto de 2008

Lo que ellos quieren

La pregunta por lo que ellos quieren. No es que a mí particualarmente me interese, ni a ninguna de mis compañeras de género. Pero, lo que ellos quieren, no queda muy claro a veces.
Pongamos el ejemplo del hombre que invita a mi prima a salir, osa ponerse una gorra con viscera, a 45º que "está recién lavada por mi vieja" WHAT? y como si esto no fuera suficiente, decide perderse por San Telmo una hora, antes de encontrar el lugar a donde la quería llevar.
Por favor... no pueden buscar la calle en una guía T aunque sea un ratito antes??? Porque claro, una vez que te perdiste, la culpa es tuya porque resulta que en esa cartera gigante que tenés no tenés la guía T! (mamá seguro la tendría). No llamamos a mamá. No; preferimos seguir dando vueltas por San Telmo una media hora más, hasta que... si! "Heladería Don Juancho"...
Heladería de barrio que deja mucho que desear. Empezando porque él desea sentársele por poco encima, primera cita señores, y espera sentársele encima?? EN UNA HELADERÍA Y A LAS 6:00 PM!!!
Ahh ahora, sentaditos, una frente al otro (ganó mi prima) viene la parte en que el pibe decide pedir una cerveza!!! claro... no se había dado cuenta de que era una heladería! OK: ahora las ganas de cavar un pozo, o de simplemente meter la cabeza adentro del agujerito para la sombrilla de la mesa roñosa de Frigor que tiene en frente mi prima va in crescendo (perdón por el latín, ya lo arreglará Ago en otro post).
Esto no es todo, con lo que rematamos esta inolvidable cita es lo que adelanta la respuesta por lo que ellos quieren. Armando charla, el pibe a mi prima: "che, vos estás saliendo con alguien" perdón? Se imaginan que supuestamente daba para asumir que no, pero igual la pobre tiene que preguntar "vos? estás solo, no?" NO, NO y NO; el pibe no estaba solo! estaba saliendo con una chica de Escobar!!! (dónde queda Escobar?)
Hasta aquí llegamos.
Flaco que querés? Sí, a nosotras no nos interesa mucho, pero ustedes podrían ponérselo a pensar seriamente... por lo menos antes de hacernos pasear por toda la city, tomar helados (con lo humillante que eso puede llegar a ser para algunas...), y encima tener que charlar después sobre la mina de Escobar!!! -de nuevo ESO DÓNDE QUEDA!!!- en serio... reflexión por favorrrrr

adio

yo, la que escribe como Borges


- Ojalá flaca, andá a lavarte las manos antes de tipear eso!

- sí,ya lo sé...


bye

domingo, 17 de agosto de 2008

De como arruinarte la cita en dos minutos

Señoras y señores esta damisela en apuros tenía una CASI cita el viernes pasado con digamos una presentación personalizada en grupo… con Mr Juancito… (este chico es para vos me decían)

Bueno, las personas invitadas fueron confirmando su grata presencia, mientras mi emoción iba en aumento como la bendita inflación argentina: el INDEC diría que no son datos comprobables de todas formas

En fin, éramos como 7 u 8 comensales, más la novia de alguno que se iba sumando, cosa que no le hacía demasiada gracia a la platea femenina en general. Cuando de repente, mi mejor amiga notó que Doña Lamentos (entra en escena una solterona que casi llega a los 30, y cualquier ómnibus de media distancia la deja en su casa) estaba enganchada con Mr Juancito, me siguen??? Y ahí, en un ataque de sinceridad, le confesó... “mirá que este muchacho no viene por vos… le queremos presentar a … MI PERSONA…”

Esa era yo! la que era el match perfecto de Mr. Juancito, que para esto estaba requete concentrado en el escote de Lamentos… haciendo sonrisas bobas y miradas de winner a la treintañera, que mientras escuchaba la adevertencia (¿?) de mi amiga seguía, bueno, calentando… si, haciéndole creer a Juan winner que de verdad estaba ganando! (porque entre nos, el pibe: se perdió a este bombón cero km. y en lugar se llevó un fiat uno modelo 93')

Dato que viene a cuento:
SMS cobarde a las 23:50 del día anterior al encuentro:
“No voy a ir mañana, me siento incomoda, sorry” FIRMA Doña Lamentos!!!

OHHH! Esta heroína se quedaría sin príncipe azul, o el intento de hombre que le querían presentar…
Perdón, no se quedaría, SE QUEDÓ… cenando con su mamá, durmiéndose antes de que terminara la novela, comiendo chocolate Milka con almendras (esas enteras y de las que raspan la garganta)

Pero bueno, hoy sale a romper la nuit, y a ver si quedo algún Romeo available en esta gran ciudad el fin de semana largo, sino se tomará un taxi, de esos nunca faltan libres… y se volverá a su hogar a seguir escribiendo mas aventuras.

HOY LA ROMPO
EL FINDE QUE VIENE LA CUENTO.

JA!

martes, 12 de agosto de 2008

Dos por Cuatro

Recordando los viejos timepos, no tan lejanos pero si sepultados en el olvido, quisiera contarles una historia!

Sábado a la noche, típica cena de amigas que no se vieron en toda la semana. Son tres protagonistas de sus vidas, piensan, deciden, se llevan el mundo por delante pero no saben con quién salir ese bendito sabado. A una la perdimos, sus obligaciones maritales no le permiten subirse en esta, por cierto muy turbia.

Sabado 11pm: mensajes de texto a full, el msn al rojo vivo (menos mal q no logueamos el facebook)

Un kit de personas compuesto por dos idiotas: uno lindo que se piensa que todas lo amamos y el mejor amigo, subsidiario del primero, envian un mensaje cada 40 segundos para saber donde nos vamos a dar cita: los cuatro. Envian mensajes a mi celular pensando q es el de mi amiga.

Otro kit de personas compuesto por un tonto y otro tonto con ansias de intelectual: desde ya es a definir la relación que los une. Sabina diría q son enemigos íntimos y opa lala se cruzaron con amigas con sentimientos de verdad. Éstos saben quiénes somos, de todas maneras les copa ponernos motes, hasta nombres de otras personas.

Houston tenemos un problema!! que hacemos!! nos citan en dos puntos opuestos de la city. A decir verdad tenemos intereses encontrados, pero gano yo porque están motorizados!

Concurrrimos a la cita y el celular suena 15 veces porque los otros no nos encuentran, miren si deben estar preocupados que hasta la preguntan a los habitues del bar en cuestion si nos vieron. (no podemos evitar agrandarnos)

Así agrandadas vamos a la fiesta en el auto de los mejores enemigos, cambio de roles, mi amiga la copada es la seria, yo soy la copada... (algo anda mal??) eso me pregunto toda la noche, especialmente en el momento en que me doy cuenta de que mi compañero, el que me corresponde, se empeña en hacerme tomar cerveza ("o lo que quieras") pero entre trago y trago vuelta y vueltita advierto que me falta una amiga, y calsualmente a mi compañero también le anda faltando el brazo derecho... channn se fueron CON EL AUTO Y MI CARTERA Y ABRIGOS! vaya a saber dónde (eso es... algún lugar... ejemmm etc.) no nos desviemos de mi trágico final, arriba de un remo de dudosa procedencia y sola. Porque el señor prefiere esperar a su amigote/enemigo íntimo. OK quién conoce más a sus amigos??, de entrada te digo que esperó toda la noche porque el señor y mi amiga no volvieron por esos pagos.

Conclusión y moraleja, decían que el cuatro era un número perfecto, perfecto para algunos... para mí esa noche; NO. Pero esa es la gracia, hoy por tí mañana por mí, los amigos siempre están primero

viernes, 8 de agosto de 2008

El Hombre al Umbral de la Puerta II

Hay pocas soluciones que pueden hacer que el hombre se retire del umbral, para pasar a otro, obviamente: la primera y menos probable es que se canse, esta opción estaría casi descartada ya que el hombre al umbral tiene paciencia de fierro y una disciplina a prueba de balas.
La segunda, poco probable también, es que descubra que su mujer ideal no es más que una construcción mental que él se hizo, muchas veces uno tiene en la cabeza esas escenas épicas, ya sea para el picado jugado con lluvia o para recordar algún momento amoroso (vamos chicos, todos lo recordamos alguna vez). La construcción mental que el hombre al umbral hace de su mujer ideal es, justamente, el concepto de perfección, ¿Cómo se logra esto? Aceptando todos y cada uno de sus defectos (en principio, recordemos que aún no ha tenido una relación amorosa con esta mujer) y resaltando obviamente los atributos que fueron, justamente, los que llamaron su atención. Esta alternativa resulta poco probable debido a la miopía vivida por el hombre al umbral, que jamás querrá darse cuenta que su Dulcinea es un poco mala con las compañías masculinas, por ejemplo.
Otra opción, y quizás la mas probable de todas es que el hombre al umbral, en un arrebato de descuido conozca a otra mujer, esas que inicialmente se conocen “para pasar el rato” (disculpen chicas, no lo hacemos con mala intención).
En principio el hombre toma esta relación como algo totalmente furtivo, esperando a su mujer ideal, pero ¿Qué pasa? Hay algo que este personaje no logra tener en cuenta y es el factor sorpresa, recordemos él que es lineal, muy lineal.
De repente este hombre se ve en citas con esta chica, llamándola, mandándole mensajitos, encontrándose causalmente en algún bar o boliche y el simple hecho de distraerse de su “Ella”, muchas veces le hace ver cualidades ausentes en su mujer ideal y, porque no, presentes en la mujer actual. Ahí es donde el hechizo comienza a fallar, donde este hombre se da cuenta que el umbral ya esta despintado, y quizás hasta un poco torcido, como así la cara de su doncella, que vuelve a las 9 de la mañana vaya uno a saber de dónde, con todo el cansancio y el malhumor posibles y, lo mas lógico, pero a su vez doloroso, es que: "si hasta ahora no pasó, ¿Por qué tendría que pasar?" Es así que el hombre al umbral deja su tan platónica, perfecta y divina mujer de sus sueños y va a los brazos de su nueva pareja, y justo ahora que la mujer soñada pensaba invitarte a salir!!!

viernes, 1 de agosto de 2008

El hombre al umbral de la puerta I

contribución de un estimado y eterno enamorado del amor. Aquí empieza el análisis del hombre lineal o la tesis sobre la obsesión masculina... a leer!

Dedicado especialmente a chico perfume y chica batman, a buen entendedor…

Se me ocurrió una topología de hombre: el hombre al umbral de la puerta.

Como lo connota semejante adjetivación, este hombre está a la espera, no anda en la búsqueda de la mujer perfecta, ya la encontró, el único y gran problema de la cuestión es que, por alguna razón, no está con ella. El hombre al umbral es, antes que nada, hombre, por lo tanto su género lo hace acreedor de una característica casi indisociable de su especie: es lineal.

Párrafo aparte aquí, la mayoría de los hombres son (somos) lineales, ¿esto que quiere decir? Que no saben o les cuesta leer entre líneas, ver más allá. Mientras por ahí una mujer espera un avance durante un encuentro donde no quedan más palabras por decir, muchas veces el hombre, por lineal, peca pensando qué decir y no qué hacer, porque, obviamente, se encuentra un paso por detrás de su doncella. Dicha condición hace que el hombre siga un comportamiento sistemático a la hora de establecer relaciones de cualquier tipo. Con las mujeres, la línea de conducta, si se puede llamar así, respondería al siguiente orden:

Conocida – amiga – mas amiga – novia o pareja.

Hay hombres que por habilidosos o arriesgados saltean cualquier tipo de linealidad pasando del primer paso al último, sin embargo, el hombre al umbral es un tipo que no puede saltear ningún paso, no vaya a ser que se equivoque.

El hombre al umbral, como dijimos anteriormente, no puede quemar etapas, por lo cual carece de sensores de indirectas, es decir: es lento, muy lento.
Seguramente esta clase de hombre habrá tenido la oportunidad de seducir a la mujer de sus sueños, pero no se ha dado cuenta, cuantos encuentros desperdiciados hablando del gusto de una cerveza, de cual es la banda mas grande de rock nacional, de Fidel, el Che o algún otro político, cuanta indirecta que perdió su objetivo cuando el hombre al umbral cambió de tema porque la charla se tornó “un poco escabrosa”…

El hombre al umbral espera, que por alguna causa sobrenatural los planetas se pongan en línea y haciendo fuerza todo el cosmos su doncella diga las tan ansiadas palabras: me gustás.
Claro, el problema de tanto esperar es, justamente, el no hacer. La doncella probablemente no se habrá dado cuenta de tener esta clase de hombre detrás o simplemente esperará a que el mismo proceda, pero mientras tanto, y no está nada mal, sigue con su actividad normal, que es la que todos queremos hacer en algún momento: conocer gente.

Ay! Como sufre este hombre cuando de boca de la mujer de sus sueños sale la frase “conocí a alguien”, creo que este hombre prefiere morir exiliado de la sociedad antes que escuchar semejantes palabras, y además se agrega otro problema, el hombre al umbral es pelotudamente bueno, ojo, quizás la bondad solo se reduzca a su mujer soñada, pero esta bondad hace que el mismo no tome coraje y en pos de salvar una amistad que peligra, evite cualquier careo sentimental con su amada.

Kurt Cobain reprodujo casi por última vez una frase que este hombre repetirá hasta que su letargo termine (vaya uno a saber cuando), “my girl, my girl, don´t lie to me, tell me where did you sleep last night”. Viernes a viernes, sábados a sábados y feriados también este hombre terminará su noche, y, entre cansancio y borrachera entonara o vendrá a su mente esta frase, que quizás hasta podría ir en el epilogo de su vida ya que su constancia lo hace esperar en el maldito umbral durante mucho tiempo.



continuará...